Me encanta el encaje de bolillos y cuando Dari me trae a la tienda algún trabajo suyo para que lo vea, disfruto, por qué no os podéis imaginar el arte que tiene. Hace verdaderas maravilllas y no se cansa de tejer metros y metros, lo mismo es para cortinas que tapetes que para la Iglesia. Mientras se pueda es muy bueno que las personas mayores estén entretenidas con labores cómodas que puedan usar la mente y las manos, me parece importantísimo.
A mi también me encantan los bolillos y esa puntilla es una de mis favoritas.
ResponderEliminarUn abrazo, Carmen María.